13 marzo, 2021

El abismo con el otro

  Después de algunos años como psicóloga, hablando con y observando a las personas, veo con cierta perplejidad cómo algunos mensajes de la psicología que pretendían ser un aporte para la vida cotidiana de las personas, puede ser un arma de doble filo. 

Tal es el caso de la comunicación. Desde la psicología de las relaciones, se ha promovido que las personas se comuniquen, expliquen lo que les pasa, sienten, imaginan, etc. Pero he sido protagonista y expectadora de excesos de comunicación y transparencia, que lejos de aportar, pueden dañar una relación. 

Igualmente, en un intento por promover la empatía, se ha puesto como ejercicio el pedirle a las personas que piensen qué hubieran hecho en el lugar de la otra persona. Pero lejos de empatizar, terminan alejándose aún más de comprender a esa persona, porque anteponen sus creencias al entendimiento del otro, que es un mundo en sí mismo.

Y para qué decir como madre, los niveles de exigencia que me ha tocado ver hacia los bebés y niños, bajo el pretexto de la "estimulación".

Cuando pareciera que el mejor consejo en realidad viene del sentido común, nos damos cuenta que no es tan común, y vuelve a surgir la soledad como respuesta a cómo lidiar con los otros, a través de frases como "pero tú eres la mamá, tú sabrás, sigue tu instinto", "déjalo/a, es así y ya", "nunca entenderás".

Tan difícil es saltar el abismo entre una persona y otra? Me cuesta creer